Si las vías respiratorias superiores (fisuras nasales y senos paranasales) permanecen inflamadas, el líquido producido gotea por la parte posterior de la garganta provocando un “goteo posnasal”. Esto hace sentir la necesidad de tragar y/o toser.
Si los pulmones y las vías respiratorias inferiores están afectados, la tos es la manera que tiene el cuerpo de tratar de eliminar el líquido y la hinchazón que detecta allí.
Las vías neurales pueden estar donde la inflamación está al acecho. Esto significa que el sistema nervioso está involucrado, ya sea centralmente (el cerebro) y/o periférico (nervios), y la tos no proviene principalmente de los propios tejidos respiratorios.
Una causa menos común pero más grave puede ser la cicatrización del tejido pulmonar a causa de la inflamación, una afección denominada » enfermedad pulmonar intersticial“